Hay un lugar donde crees poder tocar el cielo, donde no existe un mundo bullicioso, caótico y todo es muy diferente a la sociedad actual. Donde la realidad parece una utopía y puedes descubrir cientos de diversas posibilidades.
“Cachote”, fundada por Francisco Asmar, es una aldea de unas 30 familias, que contrasta con la vida citadina y común que la humanidad lleva. Ubicado a una hora de la comunidad de paraíso, en Barahona, región Sur de La República Dominicana. Este poblado esta enclavado en la Loma Remigio, a 1,100 metros del Bahoruco Oriental, en los linderos del primer Monumento Natural Padre Miguel Fuertes.
Este bosque nublado es ideal para observar aves, de las que ya se han reportado 30 especies, además de disfrutar de vistas panorámicas de valles y montañas, hermosos paisajes, una extraordinaria vegetación y hasta reencontrarse consigo mismo, por la tranquilidad que transmite el lugar, que permite escuchar el canto de las aves y sentir el murmullo de las hojas al mecerse.
Sendero de la Jibijoa
Internase en el bosque nublado a través de una caminata por el Sendero de La Jibijoa en un recorrido de una hora aproximadamente, es una de las experiencias más enriquecedoras del trayecto, en donde se encuentran una variedad de plantas y aves indescriptibles tal como las que observan una vez iniciado el ascenso a esta localidad, en la que destacan helechos, bromelias, orquídeas, etc.
Acampar, eventos culturales, canyoning, hacer turismo científico y hasta turismo de investigación son algunas de las tantas actividades que se pueden desarrollar durante la visita al Centro de visitantes Canto del Jilguero, primer centro ecoturístico de la zona, manejado por la Microempresa Ecoturística de Cachote.
El centro fue ideado para que los hombres interactúen con la naturaleza sin dañarla, creando allí el ambiente ideal para que acampen en unas 20 tiendas de campaña y pernocten en una de las 3 cabañas del lugar.
Allí el visitante no sólo conocerá y apreciará más de la naturaleza, sino que además podrás compartir en grupo, para disfrutar de cuentos y canciones alrededor de una fogata que servirá para calentarle el cuerpo, pues al llegar la tarde la temperatura desciende de agradable a fría y por las noches incluso llueve para enfriar mucho más el ambiente.
Al amanecer, después de una noche casi helada, una intensa neblina reviste todo el lugar, creando así el ambiente perfecto para compartir de un rico desayuno con café o chocolate con jengibre caliente, que dotará de las energías necesarias para iniciar otro día de aventuras en esta comunidad internada en el bosque que por la densidad de las nubes que allí se concentran dan la sensación de poder tocar el cielo con las manos.
Monumento Natural Padre Miguel Fuerte
Esta área protegida fue creada mediante el decreto 233-96 y hoy forma parte del sistema nacional de áreas protegidas. Su creación se basa en el estudio del Bahoruco Oriental, conducido por el antiguo Departamento de Vida Silvestre, el cual detectó una importancia ecológica muy alta por su gran diversidad ecológica.
Acceso
Trasladase en vehículos 4 x 4.
Por la Ciénaga, 15 kilómetros al sur de Barahona, una hora de camino.
Por Paraíso, 25 kilómetros al sur de Barahona, una hora de camino.
Tips
Ideal para los aventureros, quienes aman lo diferente, el convivir con la naturaleza, disfrutar de lo sencillo y cautivador de un ambiente natural.
Armar el equipaje de frisas, abrigos, gorro de lana, guantes y todo lo imprescindible para el frío. Vestirse de ropa cómoda, practica y que proteja de las inclemencias del clima.
Tener cámara fotográfica y de video con baterías suficientes, además de cargar el celular con suficiente batería.
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